Les presentamos a continuación dos textos escritos por alumnos de noveno del Colegio. Vale la pena dedicar unos minutos a la lectura y disfrutar de la creatividad de los chicos. Los envía Pablo:
Raúl Pérez vivía solo con sus hijos y era la típica persona que todos los años viajaba hacia la cordillera. Hacía siempre los mismos paseos por la montaña, alquilaba siempre la misma cabaña, montaba los mismos caballos y disfrutaba al máximo del frío. No viajaba lejos por su temor a volar ni tampoco era de esos que gastan mucho en viajes.
El verano apenas había comenzado y Raúl como todos los años preparaba la lista del viaje. Sus hijos aburridos por los típicos paseos dentro del país, donde no hacían más que visitar los desgastados y olvidados museos antiguos y pasaban horas frente a una diminuta llama de esa vieja chimenea mientras las raíces de los árboles rompían las paredes, le propusieron viajar a la playa.
Raúl no accedió pero tras seis horas de incesantes súplicas no tuvo más remedio que darle el gusto a la familia. La pregunta era a dónde ir. Mar del Plata era demasiado común; Río de Janeiro muy caro; Montevideo… perfecto.
Viajar por tierra era una idea más que ridícula, debido al dinero perdido en combustible y el diminuto baúl donde apenas entraba un bolso.Raúl insistía en ir en automóvil pero no tenía opción. Consultó a la aerolínea más económica y partieron hacia Uruguay. Mientras que sus hijos dormían cómodamente, Raúl sudaba como loco y pedía repetidos vasos de agua para calmar los nervios.
El avión aterrizó al mediodía, Raúl corrió hacia la salida y fue el primero en bajar. Un elegante auto los esperaba al final de la escalera, con un cartel que decía familia Pérez. Al principio dudaron pero se decidieron a tomarlo. Estacionaron en un hotel de lujo y se les otorgó la suite más cara. Los acompañaron a la parte de atrás del hotel donde se encontraba un balneario económicamente inaccesible para ellos.
Pasaron los mejores 20 días de su vida. Hasta que apareció la verdadera familia Pérez, la dueña de las reservaciones. Una exitosa familia uruguaya que a simple vista, se veía que vivían con lujo. No se sintieron contentos con el malentendido y le pidieron a la familia de Raúl que pague sus gastos. Al ver el precio, Raúl se tornó blanco y sus ojos casi saltaron de su cara.
El año que viene, a la cordillera
Alumno de 9no. 2da
Utilizada por miles de artistas, su silueta de color opaco ha estado por todo el mundo. Cuenta con un ojo en el centro de su barriga y seis caminos que la atraviesan, comenzando desde la cabeza hasta sus pies Al tocarla, emite una armonía que te tranquiliza el alma
Es parecida al cuerpo de una mujer, dicen muchos, y su trayectoria ha sido larga al igual que su cuello. Con su interior al descubierto, se muestra y habla siempre igual, ya sea en el campo o en la ciudad. Por eso, escucha los aplausos a través de sus seis pequeños oídos.
Alumna de 9no. 1ra
La familia de Raúl

El verano apenas había comenzado y Raúl como todos los años preparaba la lista del viaje. Sus hijos aburridos por los típicos paseos dentro del país, donde no hacían más que visitar los desgastados y olvidados museos antiguos y pasaban horas frente a una diminuta llama de esa vieja chimenea mientras las raíces de los árboles rompían las paredes, le propusieron viajar a la playa.
Raúl no accedió pero tras seis horas de incesantes súplicas no tuvo más remedio que darle el gusto a la familia. La pregunta era a dónde ir. Mar del Plata era demasiado común; Río de Janeiro muy caro; Montevideo… perfecto.
Viajar por tierra era una idea más que ridícula, debido al dinero perdido en combustible y el diminuto baúl donde apenas entraba un bolso.Raúl insistía en ir en automóvil pero no tenía opción. Consultó a la aerolínea más económica y partieron hacia Uruguay. Mientras que sus hijos dormían cómodamente, Raúl sudaba como loco y pedía repetidos vasos de agua para calmar los nervios.
El avión aterrizó al mediodía, Raúl corrió hacia la salida y fue el primero en bajar. Un elegante auto los esperaba al final de la escalera, con un cartel que decía familia Pérez. Al principio dudaron pero se decidieron a tomarlo. Estacionaron en un hotel de lujo y se les otorgó la suite más cara. Los acompañaron a la parte de atrás del hotel donde se encontraba un balneario económicamente inaccesible para ellos.
Pasaron los mejores 20 días de su vida. Hasta que apareció la verdadera familia Pérez, la dueña de las reservaciones. Una exitosa familia uruguaya que a simple vista, se veía que vivían con lujo. No se sintieron contentos con el malentendido y le pidieron a la familia de Raúl que pague sus gastos. Al ver el precio, Raúl se tornó blanco y sus ojos casi saltaron de su cara.
El año que viene, a la cordillera
Alumno de 9no. 2da
Una forma original de describir un instrumento musical

Es parecida al cuerpo de una mujer, dicen muchos, y su trayectoria ha sido larga al igual que su cuello. Con su interior al descubierto, se muestra y habla siempre igual, ya sea en el campo o en la ciudad. Por eso, escucha los aplausos a través de sus seis pequeños oídos.
Alumna de 9no. 1ra
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